domingo, 9 de noviembre de 2008

MUSICIRCUS

Hoy iba a ser un típico "domingo flojo": despertamos tarde, hicimos un almuerzo rápido que comimos en pijama, navegamos un rato en internet y vimos tele. Después de almuerzo me comí un rico mote con huesillos y después me quedé dormida en el sillón dándole papa al Santi.

Desperté a las 5 y el Seba me recordó que hoy había algo en el Centro de Extensión... me mostró el afiche de Musicircus y en verdad no entendimos mucho de qué se trataba. El afiche nos decía "¡No se pierda el evento paradojal del año! ¡No escuchará nada: escuchará todo!" y prometía una inaudita conjunción simultánea de música coral, flamenca, infantil, andina, bossa nova, entre muchas otras (vean el afiche, a ver si quedan tan colgados como nosotros).

Bueno, esta cosa empezaba a las 6, así que me dijo "si vamos, hay que moverse ahora"... y entre no hacer nada y salir de la duda al menos, acepté ir. Aunque igual me daba un poco de lata por el Santi, porque me imaginé música y aplausos y hace un par de días en la titulación de mi hermana (ah, por cierto, mi hermana se tituló de profe de lenguaje!! :D) el pobre lloraba cada vez que la gente aplaudía.

Llegamos un poco antes de las 6 y era como una feria con stands, y en cada uno de ellos había un cartelito que indicaba el artista que se iba a presentar y su instrumento. También había vendedores de cuchuflíes, algodón de dulce (¿o algodón dulce? nunca supe cómo se llama) y palomitas de maíz. De pronto sonó como un pito y todos empezaron a tocar a la vez. Sí, como lo leen, todos a la vez... ¡qué cosa más freak! :D

Se imaginarán el caos que se armó. Y no les he contado algo: una de las cosas que más odio en la vida es el ruido, o mejor dicho la estridencia... y adivinen qué era lo que más había ahí... :P Na' que hacer, ya estábamos ahí y al menos había que ver qué era lo que estaba sonando!

En el primer piso lo que más nos gustó fue el chinchinero, que estaba acompañado de un chinchinerito exquisito. Creo que nunca había visto a un chinchinero!! Me di cuenta porque recién hoy caché que con el pie hacen sonar los platillos :D También había un grupo de música escocesa; una tele mostrando "música con imágenes" y unos gallos metiendo boche con computadores.

Después vimos que en el segundo piso seguía, así que subimos... ahí estaban las cosas más raras: música con copas de agua; música a cuerda (que eran cajitas musicales); música con unos como palos de agua que se llamaban didgeridoo; un señor con un guitarrón de 25 cuerdas; y el mismísimo Elvis El Rey, con su voz y caderas.

Y ahí estaba yo, un poco colapsando... hasta que las vi, justo al lado de un loco que movía una batuta dirigiendo una orquesta imaginaria... ahí estaban Lulú Corcuera, Michelle Salazar, Cecilia Alamos y Victoria Carvallo, las Mazapán!!! Y de ese lugar no me movió nadie :D
Si acaso hay alguien que no conozca a Mazapán, les cuento que es un grupo musical que marcó mi infancia con sus hermosas melodías. Son unas ídolas máximas!! Y nunca pensé que así, tan inesperadamente, iba a tener la oportunidad de verlas... y de cantar con ellas! Fue lo máximo!!!

Como estábamos con Santi, me arrodillé en el suelo para quedar a su altura y ahí nos quedamos, cantando con las tías de Mazapán. Claro que mi chiquilín no cachó mucho, jajaja. Pero yo estaba chocha!! Y junto conmigo toda la gente que se congregó alrededor, en su mayoría mayores de 20 que cantaban felices canciones como El Fantasma, El Ratón, Tortuga Concha, La Cuncuna Amarilla, Las Polillas, La Chinita Margarita, y muchas más!!! Era divertido ver la expresión en sus rostros cuando se daban cuenta que en ese espacio estaban las Mazapán con sus voces y juegos. Lo pasé chancho, "del verbo chancho". Después nos sacamos una foto (con el celu del Seba... ¡pucha que extrañé mi camarita amiga!) y nos fuimos.

Y finalmente no tuvo nada de común este domingo... ¡quién lo habría pensado! Salimos de la duda de lo que era ese Musicircus y todo el caos valió la pena por haber estado ahí, a un par de centímetros de las Mazapán. Realmente un día memorable...